viernes, 21 de febrero de 2014
On 21:37 by Unknown in Mapa Corporal 1 comment
Crear espacio es un acto de definición del ser… es la forma
como llegás a conocer a la vastedad de tu propio ser. Es así que se dio la
Creación misma. Al menos, así es como dicen la experimentó Dios (Genesis 1).
Como ves, aparentemente Dios
se las pasó creando espacio entre las cosas, para que pudiésemos distinguir una
de otra y darle a cada una su uso apropiado.
Veamos
cómo sería esto en tú vida. Crearemos espacio en tu axila.
Sí, ya
sé. ¡¿La Axila?! WTF?!
La
axila es ese pedazo de piel, políticamente incorrecto, que se las ingenia para
producir tres cosas que te pueden dejar mal parada en una reunión social cuando
levantás el brazo para saludar a una amiga: sudor, pelos y olor. No importa
cuánto insista Dove en que podés tener “axilas bonitas”, ni cuánto te estimule con
propagandas de mujeres felices de “lucir sus axilas”, para la mayoría las
axilas siguen siendo un área en la que sólo pensamos cuando nos ponemos
desodorante, nos depilamos, o (¡Dios no lo permita!) nos encontramos mal
preparadas en un caso de sudor, pelos u olor.
Lo que
quizás nunca te imaginaste es que tu axila es un hueco (es más en inglés se le dice armpit o sea, fosa del
brazo). Como todo hueco o fosa, tiene paredes
que circunscriben un espacio. Y ese espacio es vital para el correcto
funcionamiento de la articulación del hombro.
Así que, ¿qué te parece si (re)creamos la
fosa de tu axila?
1. Con tu mano derecha tomá suavemente
con los dedos la pared delantera de tu axila izquierda (para quienes le
interesa la anatomía, ese es tu pectoral mayor… para el resto, esa es la pared
de adelante de tu axila… y punto). Dejá que tu brazo izquierdo descanse
tranquilo a tu costado y pedile mentalmente a la pared delantera de la axila
que se relaje, suelte, suavice, afloje (a mí me gusta usar la imagen de agua
tibia corriendo por el área, masajeándola hasta aflojarla… pero tú usá
cualquier imagen, palabra o cualidad de toque que logre ese efecto para ti).
2. Ahora tomá suavemente con tus dedos la pared
trasera de tu axila (músculos dorsal ancho y redondo mayor) y permitiles
relajarse.
3. Ahora con suavidad tocá la cara interna de tu
brazo, bien profundo en la axila; esa es la pared externa de tu fosa (músculos
coracobraquial, bíceps, tríceps) y pedile a esa área que se relaje y suelte.
4. Por ultimo tocá la pared interna de la axila
(músculo serrato
anterior), bien arriba en la fosa, es una superficie dura
porque hay
costillas, y pedile a esa pared que se suelte y suavice también.
Ahora
tomate unos segundos para notar la diferencia entre tu axila izquierda y tu
axila derecha.
Si todo
marchó más o menos bien, tendrías que tener una imagen sensorial más clara de
las superficies de tu axila izquierda, en comparación con la sensación que
tenés en la axila derecha (y si todo fue más que bien, quizás incluso se te
aflojó un poco de la tensión del cuello, hombros o/y espalda alta).
Esta
imagen más clara surge de haber diferenciado una parte de las otras partes, o
sea, de crear espacio entre las partes.
Este
principio de crear espacio para poder distinguir qué es qué, aplica a todo en la
Vida.
Cuando
estás inmersa en una reacción habitual (sea un hábito físico, mental o
emocional), no estás siendo consciente de lo que estás haciendo (o mejor dicho
lo que están haciendo tus partes). Cuando estás inmersa en un hábito estás
actuando un libreto, completamente identificada con el personaje que te
asignaste. La única forma de que te des cuenta que estás actuando un rol es
parando y tomando un paso de distancia de la situación y verla – y a todo lo
que en ella hay – por lo que es realmente, verla en su contexto.
Cuando
creaste espacio, tu previamente amorfa, poco distinguida e indistinta axila se transformó
en esta fabulosa articulación compuesta por diferentes partes que interactúan
entre sí en un espacio.
La misma idea aplica a tu vida emocional. (Ya
escribí sobre esto antes, si te interesa leer sobre el tema, podés ir a esta entrada donde cuento cómo usé este principio para manejar pensamientos
angustiosos, o a esta sobre los límites, o esta entrada y esta entrada sobre los temas de parar y ver las
cosas en contexto.)
Crear espacio no se
trata de separarte de una parte para aislarte de ella y eliminarla de tu vida. En
vez, se trata de llegar a conocer íntimamente a las diferentes partes de ti un
poquito más. Todas son tuyas, todas son tú, ¡pero al menos ahora sabés cuántas
y cómo son!
Es igual a la diferencia entre saber que
tenés $500 en tu billetera, o saber que tenés $500 en total en 3 billetes de
$100, 2 de $50, y 5 de $20. De cualquiera de las 2 maneras sabés que tenés $500,
pero en el segundo caso sabés también que podés usarlos para tomar el bondi
(sin que el guarda o conductor te mire como para matarte).
Crear espacio te da
más opciones, más libertad para elegir cómo usar tus recursos.
---
La Buena Postura es un tema de crear
espacios en tu cuerpo más que de hacer esfuerzos musculares con tu espalda.
Te
invito a descubrir esto por ti misma en mis Talleres
de Postura.
Para recibir la información anotá tu nombre
y tu email en el formulario que aparece en la esquina superior derecha del blog
(si estás leyendo esto en tu móvil o tablet quizás no te aparece el formulario.
En ese caso, mandame un mail a vstanham@gmail.com
con el asunto “quiero recibir información sobre los talleres de postura”).
Images credits:
"World Nature" by Danilo Rizzuti/freedigitalphotos.net
"Sensual Young Female Model, Closeup Shot" by stockimages /freedigitalphotos.net
"Bus Stop" by anankkml/freedigitalphotos.net
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Thank you for sharing such a useful tip.
ResponderEliminarlong stay parking luton