viernes, 3 de octubre de 2014
On 15:24 by Unknown in Crear Espacio No comments
Un blog sobre cómo crear espacios
Hola. Soy Victoria. Bienvenido al blog. ¿Cómo estás
hoy?
Yo tiendo a andar un poco acelerada. Fuera de mi
centro. Por eso me gusta parar cuando noto que algo nuevo empieza.
Te invito a centrarnos. Solamente pará con todo lo que
estabas haciendo, notá tu respiración y las sensaciones que te llegan a través
de tus sentidos. Inhalemos y exhalemos juntos.
Gracias. Ahora sí, arranquemos.
En este blog me gustaría contarte lo que he aprendido
sobre crear espacios: espacios mentales y físicos,
espacios dentro y fuera, espacios entre el estímulo y la reacción.
Me quedo contenta si al final de este encuentro te
pude comunicar algo de lo liberador que es darse
esos espacios; y si no los conocés que te haya tentado lo suficiente para
probarlos.
¿Cuál ha sido tu experiencia con tu
espacio personal?
Voy a mostrarte cómo creo yo mis espacios.
Me baso en los siguientes principios:
Unidad: Si creo espacio en mi cuerpo, tendré espacio en mi
mente.
Diseño: Mi cuerpo está diseñado para ocupar
cierto espacio con libertad, y lo hará si se lo permito.
Uso-Estructura-Funcionamiento: Cuando le doy su debido espacio a
mis estructuras, estas funcionan mejor.
Mejorar la percepción: Cuando las estructuras tienen
espacio, las puedo percibir mejor que cuando están apretadas.
Parar
y Elegir: Como
mi hábito es atropellarme, necesito parar antes de actuar, para darme espacio
para elegir.
El Cómo
sobre el Qué: Darme espacio físico es solo posible si me doy espacio mental
también. Cómo me doy ese espacio es lo más importante. Por eso, si estoy muy
acelerada, me acuesto en semi-supina; me doy las mejores condiciones para parar
realmente.
¿Te parece si antes de seguir, nos damos un poco de
espacio?
Te invito a que bostecemos y nos estiremos un poco,
para darle aire a los tejidos y las articulaciones.
Bueno, a nivel práctico, ¿cómo
creo mis espacios?
Lo primero es decidir qué espacios estoy
necesitando habilitar.
¿Dónde se está trancando el flujo de
movimiento? ¿Dónde hay tensión? ¿Dónde siento que estoy fuera de ritmo?
Una vez que identifico el área que pide más espacio
para funcionar o integrarse, busco en su estructura
algunos puntos para tomar de referencia, y trato de entender cómo está
diseñada para funcionar.
Si lo que quiero es crear espacio en mis pies, puedo
mirar su anatomía en un libro, y luego palparlos en mi propio cuerpo.
Si no tengo ni idea qué hacer, pido ayuda a alguien
que sepa más que yo del tema.
Elijo dos puntos en la estructura que
quiero liberar. Los toco simultáneamente y me doy cuenta que hay un espacio
entre ellos. Los uno con una línea imaginaria e imagino que los extremos de esa
línea se alejan entre sí, flotando como en corrientes de agua opuestas.
Te invito a que pruebes esto por ti mismo. Elegí puntos en tu cuerpo, unilos con líneas imaginarias, y dejá que
floten alejándose. Ayuda hacerlo acostado boca arriba sobre el piso, con tus
pies apoyados y tu cabeza apoyada sobre un libro gordito.
Al hacer este ejercicio, reconocé todo el
espacio que hay entre punto y punto. También podés
reconocer el espacio a tu alrededor, dejando que tus líneas se proyecten más
allá del límite de tu cuerpo.
Este espacio que te creás dentro, fuera, entre tú y los estímulos que te
llegan, este espacio te vuelvo multi-dimensional,
te vuelve real, te de-vuelve a ti mismo.
Te invito a vivir desde este lugar y volver a él cuantas veces quieras.
Es tu espacio personal.
Es tu casa, es tu verdadero hogar.
Hasta la próxima.
Victoria
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